Ajustados
El costo de las pensiones en las universidades privadas del Perú es una problemática que afecta tanto a los estudiantes como a sus familias, este dependerá de la calificación que la misma universidad le otorgará evaluando sus ingresos y egresos para asignarle una escala, ¿pero es posible que la institución asigne una escala que no está dentro de sus posibilidades económicas?
Las universidades privadas en el Perú ofrecen una variedad de programas académicos y oportunidades educativas como convenios con universidades extranjeras, además la infraestructura y los equipos modernos son uno de los beneficios que posee una institución privada pero el acceso a estas casas de estudios a menudo está condicionado por altas pensiones que se cobran a los estudiantes.
Cabe precisar que si un estudiante decide estudiar en una universidad privada es porque cuenta con el poder adquisitivo para cubrir sus mensualidades, pero también se sabe que las pensiones fluctúan cada año, es decir, no es el mismo monto de cuando inicias la carrera a cuando la terminas. Estas suelen ser más altas a comparación de la primera pensión, es por ello que las universidades privadas brindan un servicio de recategorización de pensiones, el cual le permitirá al estudiante ser evaluado por segunda vez, también se debe tomar en cuenta aspectos externos como problemas sociales, políticos o económicos que atraviesa el país.
El estudiante de Administración de la Universidad Ricardo Palma, Diego Sandoval, comenta que hasta el momento no ha tenido ningún inconveniente para continuar con los pagos de su mensualidad, además señala que no percibe muy caro la pensión impuesta por su institución, sino lo ve como un montón accesible.
Si bien las opiniones varían de acuerdo a la disposición económica, se sabe que no todos los estudiantes cuentan con el mismo poder adquisitivo.
UN POCO DE DATA
En los últimos cuatro años, a raíz de la pandemia del Covid 19, se ha visto una clara recesión en la economía del país, según datos del Banco Mundial, el Perú aumentó una cifra de 26% en 2021 a comparación del año 2019, el cual reflejaba un 20%, un número que venía en decadencia del 59% en el año 2004, es decir que los peruanos en el año 2004 eran mucho más pobres que en el año 2019.
Por otra parte, los problemas sociales y políticos también afectan a la economía del país, en otras palabras, el Perú ha pasado por seis presidentes en los últimos cuatros años, un número muy alto demostrando así la crisis política actual que se vive.
¿Pero a quienes les afecta estas crisis? A la gente más pobre, según data del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) en el año 2021 se vio un incremento del 6.2% en la cantidad de trabajadores formales con respecto al mes anterior del mismo año, en cuánto a la tasa de trabajadores informales éste contaba con una cifra del 75% según el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) reflejando el grado de la inestabilidad en la economía del país.
Asimismo, se ha observado un aumento constante en el costo de las pensiones universitarias en las instituciones privadas. Esto ha generado preocupación entre los estudiantes y sus familias, especialmente en aquellos con recursos económicos limitados.
Para el estudiante de Psicología de la Universidad Ricardo Palma, Gustavo Pineda, costear la universidad ha sido un reto para él en estos últimos años, si bien no deja de estudiar por temas económicos, ha notado que su familia se encuentra pasando por una crisis salarial. “Ya no es igual que antes, antes podía gastar sin tener el miedo de quedarme sin pasaje, ahora, debo medir” mencionó, además contó que su familia ya no paga puntualmente sus mensualidades como inicialmente lo hacían.
SIN SALIDA
Por otra parte, más de un estudiante han recurrido a préstamos educativos, becas, programas de trabajo para poder costear sus pensiones universitarias. Sin embargo, estas opciones no siempre están al alcance de todos los estudiantes y pueden generar una carga financiera a largo plazo.
Es importante abordar esta problemática debido a que plantean desafíos significativos para los estudiantes y sus familiares, ya que no se busca paralizar los estudios sino avanzar acorde de la carrera. Asimismo, se ha demostrado que las opiniones varían de acuerdo con la disponibilidad económica que poseen, pero se sabe que, en toda universidad privada, es necesario garantizar un acceso más equitativo y asequible.
Finalmente, debe fomentarse el dialogo con la institución y solicitar una recategorización de pensión, sino se encuentra en los recursos económicos.